
Si partimos de la base de que el «plato nacional» británico es fish and chips (pescado y patatas fritas), cabe pensar que el ferrocarril de esa nación se planteó su transporte -el del pescado en este caso- en las condiciones más adecuadas desde el primer momento. Y aquí hay un «bodegón ferroviario» recordando este asunto. Me parece.
Al fondo de la imagen hay otro carro, en este caso con cajas de flores. También es un buen elemento para transportar por ferrocarril. Están en el National Railway Museum de York, en Inglaterra.