
En 1933 estaba en servicio la línea internacional de Canfranc. Los habitantes de Huesca, para acceder a ella, debían viajar hasta Ayerbe porque los trenes circulaban por la variante de Turuñana. Para ir a Zaragoza o Barcelona había que ir a Tardienta, como siempre se había hecho desde 1864, cuando entró en servicio la línea Tardienta-Huesca. El repaso a un anuncio publicado en el diario oscense El Pueblo el 17 de agosto de 1933 nos permite recordar qué servicios había para viajar en tren o autobús en esas fechas.

Había once servicios de ida y otros tantos de vuelta en la estación del ferrocarril. Los destinos eran Zaragoza, Tardienta y Ayerbe. Había un servicio Huesca-Zaragoza que salía a las 7,30 de la mañana y regresaba a las 21,47 horas. El resto de servicios tenían como destino Ayerbe, para enlazar con los venían de Zaragoza, vía Turuñana, y se dirigían a Canfranc, o bien con destino Tardienta, para enlazar allí con los que se dirigían a Zaragoza o a Barcelona.
Por ejemplo, el tren que salía de Huesca a las 10,45 combinaba en Tardienta con el correo que iba a Barcelona, a donde llegaba a las 19,30 horas. El que salía a las 15,45 hacía lo propio con el rápido de Zaragoza que llegaba a Barcelona a las 22,30 horas.
Los convoyes eran correo, mercancías y tranvías, según servicios. Había cuatro hasta Ayerbe, dos matinales y dos vespertinos, y siete a Tardienta, incluyendo el de la mañana que llegaba a Zaragoza. Tres eran por la mañana y cuatro por la tarde.

El anuncio del periódico recoge también once líneas de autobús: Zaragoza, Barbastro, Sesa-Sariñena, Almudévar-Tormos, Alcalá de Gurrrea, Ayerbe (por Bolea-Loarre), Colungo, Laluenga, Robres, Grañén y Bespén. Excepto el de Zaragoza, que salía a las 8,40 y regresaba a las 19,30, todos los demás venían a Huesca desde la localidad de origen por la mañana y regresaban a primera hora de la tarde.
Fantástico… Como siempre.
Me gustaMe gusta