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El recambio 188043


Bolsas con los recambios

El otro día, intentando solucionar un problema en la cafetera de la cocina, logré de una sola tacada cargarme la jarrita y la cazoleta con el filtro. Bien, muy agudo. A la bolsa correspondiente marcharon la jarra, por un lado, y la cazoleta con el filtro por el otro. El tape de la jarra lo guardé porque creí que las vendían sin tape. Craso error lo del filtro, como veremos.
Pensando que la tienda con los recambios estaba en un extremo de la ciudad fui allí, pero curiosamente el establecimiento al que debía estaba en una tercera punta de la ciudad. Bueno, así caminaba más rato.
Llegué e hice el encargo. De qué modelo. Expliqué cómo era. No, me dijeron, hay que mirar debajo de la cafetera unas cifras y unas referencias. Marché a casa, miré las referencias y llamé por teléfono para saber qué modelo era. Ya está.
Como Huesca es una ciudad pequeña hay que encargar los repuestos fuera. Mañana estarán. Al día siguiente, efectivamente, estaban allí: la jarra 461219 y la cazoleta 483507. Aboné el importe y me fui a casa para tomar el primer café en la parcialmente renovada cafetera. Al quitar los elementos de las bolsas vi que la cazoleta 483507 no llevaba ningún filtro. ¿Se habrían olvidado de ponerlo en la fábrica? Llamé la tienda de repuestos en cuestión y resulta que por un lado iba la cazoleta y por otra el filtro, en concreto era el 188043. Bueno, lo encargo. ¿Estará mañana? No, pasado mañana.
Pasaron dos días y un nuevo paseo justo hasta la otra punta de la ciudad. Bueno, allí estaba en el estante de repuestos: 183043. Ya tenía todos los repuestos. El fin de semana me había cargado la cafetera, el lunes había hecho una gestión sin solución, el marte había encargado los recambios que llegaron el miércoles, día que había reclamado la pieza que faltaba, que llegó el viernes.Cinco días para recuperar la cafetera que hace un café que me gusta porque le tengo tomada la medida de las dosis necesarias.
Ya estaba. Llegué a casa, limpié todo, lo puse en marcha…. y funcionó sin problemas. Menos mal, lo normal hubiera sido que me hubiera equivocado en algo. El café estaba bastante bueno. Enfín, hice ejercicio y comprobé lo limitado que es vivir en un sitio pequeño para esto  de los repuestos. No quiero imaginar qué me hubiera pasado de vivir en un pueblo más reducido de tamaño. Todo esto, supongo, con el añadido de viajes en coche o autobús, Caray con los repuestos y el mundo rural.

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